sábado, 20 de febrero de 2010

Las buenas practicas en educación



Comenzare siguiendo a Miguel Calvillo diciendo que las buenas practicas en educación pueden encontrase en todos los aspectos de la vida escolar (organización escolar, estructura del currículo, actividades, evaluación, …) y todas las dimensiones (generales, particulares y especificas). Ahora bien, este concepto de buenas practicas es el ideal de quienes estamos en las escuelas todos los días buscando caminos para lograr resultados que permitan los cambios necesarios para una mejor educación de nuestros estudiantes. Este camino es un proceso continuo de búsqueda de estrategias que permitan acercar el conocimiento científico a la realidad de la comunidad estudiantil, además de fomentar valores humanos en tiempos de disvalores.
Por otra parte entender que las buenas practicas en educación se encuentran en pequeñas experiencias con resultados muy positivos que a veces no se conocen y que serian de gran beneficio para otros docentes.
De tal manera aquí es importante entender las nuevas funciones que cumple la educación en el marco de una sociedad del conocimiento, comprendiendo la complejidad de la realidad económica y social en la que esta inserta una comunidad educativa. Isabelino Siede dice que la escuela esta atravesada por múltiples sentidos y propósitos, pero los que dieron origen y eficacia al sistema educativo hoy son insostenibles. También plantea que reemplazarlos por nuevas convicciones es un desafío complejo, pero puede ser creativo y apasionante; la pedagogía, como la ética y la política, hunden sus raíces en las practicas sociales, a las cuales intentan interpretar y sobre las cuales tratan de intervenir.
Por lo tanto revisar e innovar en nuevas practicas educativas es un camino de reconstrucción y validación de las convicciones en las cuales se sustentan la nueva escuela.
En vísperas de los cambios en las políticas educativas Nacionales y Provinciales, se hace imprescindible contar con espacios de intercambio sobre buenas practicas en todos los niveles, experiencias y proyectos que generen discusiones y análisis sobre que estudiante tenemos y queremos, los contenidos, las relaciones, los malestares, las culturas juveniles, las políticas educativas, la sociedad, etc.
La búsqueda de una buena educación y de la equidad social son fines trascendentes que comparten sectores amplios de nuestras sociedades.
En este sentido es conveniente tener en cuenta los diferentes campos de interés intelectual, entre los que se encuentran los siguientes:
Calidad educativa
Equidad social
Administración escolar y organización de los sistemas de educación
Evaluación de los aprendizajes
Mecanismos novedosos de financiamiento
Formación de docentes
Uso eficaz de las tecnologías de la información y la comunicación
Programas no formales de inclusión social.
Relacionar la palabra CALIDAD con buena educación es una concepto de importante análisis a la hora de pensar en buenas practicas educativas, sumadas a otras que sustentas las leyes de educación como EQUIDAD, INCLUSION, IGUALDAD DE OPORUNIDADES, etc.
De este modo es imprescindible fomentar la cultura de la innovación para generar buenas practicas educativas en el marco de una escuela compleja y dinámica, que viene seguida de una sociedad que demanda mayores exigencias a la hora de relacionar la educación con el mundo del trabajo, sin dejar de lado los valores que son en definitiva el sustento y la esencia del ser humano.
Por lo antes dicho, las experiencias en buenas practicas son la semilla de los cambios posibles que pueden ser socializados a todo el sistema educativo.
Desde mi experiencia personal puedo cita la implementación de los CAJ desde el año 2001 y el proyecto Escuela para Jóvenes con experiencias significativas de buenas practicas que hoy son resurgidas con la reorganización curricular que se implementara en la escuela media, ente otros que he llevado a cabo a los largo de mis 20 años de experiencia docente y trabajo, no solo en las aulas, administración y gobiernos de las escuelas, sino también en aquellas practicas no formal pero que permitían que los jóvenes vuelvan a la escuela.
En este sentido las buenas practicas pueden interpretarse como una elemento de un concepto inclusivo y de alto impacto compresivo.
A modo de conclusión quiero aportar mi granito de arena, convencido del rol que desempeño como docente de la provincia de Córdoba.
Atte.
Prof. Alejandro Oscar Cantón